POSIBLE VENGANZA CONTRA GUARDA QUE MATÓ A MOLLINATO. 1907

Ya vimos cómo en febrero de 1906 un guarda de La Serafina había matado a un mollinato y herido a otro por robar aceitunas. Esta noticia que nos da El Defensor de Córdoba, diario católico, en su publicación del año IX, número 2358, del día tres de agosto de 1907, puede llevarnos a la venganza de aquel crimen que quedó impune. Dice así:

De otros pueblos

Sobro (sic) una agresión

Días atrás dimos cuenta de una brutal agresión realizada en Palenciana, contra un operario de nuestro querido amigo don Juan Velasco.

Hé aquí nuevos detalles que vemos en la prensa de Málaga:

“El primer teniente de la guardia civil, don Alonso García Rojas, jefe de la línea de Alameda, recibió una comunicación del encargado de la pareja de Palenciana, destacada en la finca de los Alcachofares Altos, dando cuenta de que en el sitio denominado “Los cincuenta y seis”  se presentaron tres sujetos armados de escopetas, dos á pie y uno á caballo, sorprendiendo a Bautista Núñez Calle ganadero del médico don Juan Velasco, de Palenciana, que se hallaba custodiando diez caballerías, sosteniendo con él fuerte tiroteo y resultando el guarda con un muslo atravesado.

Inmediatamente empezó á practicar diligencias el mencionado oficial, en unión de fuerza á sus órdenes, informándose por don Francisco de Paula, copropietario de los Alcachofares bajos, que se había encontrado un pañuelo lleno de sangre, perteneciente tal vez á uno de los desconocidos, que resultara lesionado por los disparos que le hizo el guarda, deduciendo después de ciertas averiguaciones que el propósito de los sujetos desconocidos era asesinar á Bautista Núñez , impulsados por resentimientos antiguos, pues hace años el guarda sostuvo tiroteo con varios vecinos de Mollina que sorprendió hurtando aceitunas; y en otra ocasión riñó en Villanueva de Algaidas, de donde es natural, con uno de sus paisanos, hiriéndole gravemente, de cuya causa salió absuelto, entrando entonces al servicio del señor Velasco.

Cuatro o cinco noches antes del suceso oyó Bautista que le preguntaban cuando iba a quedarse dormido, contestando con dos disparos hacia el sitio donde salía la voz, creyendo fueran estos indivíduos los mismos que agredieron al guarda días después, de cuya refriega resultó herido uno de los desconocidos,  á quien se llevaron en bestia á un caserío ó pueblo cercano.

Reconocidos los terrenos próximos escrupulosamente no se halló á ninguna persona sospechosa, ni se pudo comprobar por los médicos y farmacias haber curado a ningún individuo”

De todo lo cual resulta segun (sic) entonces decíamos que se trata de una agresión infame que quedará sin correctivo.

En la imagen, página del periódico donde aparece la noticia.