PRIMERA VUELTA CICLISTA A ESPAÑA. 1935
Organizada por el diario Informaciones la primera Vuelta Ciclista a España tuvo lugar entre el 29 de abril y el 15 de mayo con un recorrido total de 3.425 km. divididos en 14 etapas con inicio y final en Madrid.
La undécima etapa, de 260 km. se disputó el día 11 de mayo entre Granada y Sevilla. El ganador de la etapa fue el mismo de la general: el belga Gustaaf Deloor.
Así relataba el día once de mayo de 1935 el Heraldo de Madrid lo sucedido en la etapa:
La etapa de hoy
SEVILLA 11 (6 t.). — La etapa Granada-Sevilla, corrida hoy, ha sido mucho más interesante que las celebradas últimamente. Los corredores desde el primer momento se han empleado con más codicia y han desarrollado mejores velocidades. Tenemos noticias de que anoche el Comité organizador de la Vuelta se entrevistó con los routiers y les comninó a que actuaran con más entusiasmo.
Parece, incluso, que se adoptaron determinaciones enérgicas con algunos de estos corredores.
Efectivamente, la receta no ha podido dar mejor resultado.
El final de la etapa de hoy ha sido magnífico, pues bastantes kilómetros antes de llegar a Sevilla, los corredores empezaron a atacar firmemente y produjeron divisiones en el pelotón que iba en cabeza.
Momentos antes de llegar a la meta el belga Déloor hizo un esfuerzo fantástico, esfuerzo calculado además perfectamente, y logró aventajar por escasa diferencia a sus próximos seguidores, Max Bulla, Cañardo y Cardona.
LA SALIDA DE GRANADA
También hoy llevamos retraso. Aunque estaba anunciada la salida para las seis, hasta las siete menos veinte no partieron los corredores de la plaza del Carmen, de Granada, para cinco minutos después tomar la salida oficial en la avenida de la República.
Antes de emprender la marcha conversamos con los hermanos Trillo, quienes nos dijeron que se encontraban enfermos, especialmente Manolo, no obstante lo cual ambos emprendieron la marcha.
Se sale despacio, pero a los pocos kilómetros se fuerza la marcha y al pasar por Santafé, primer pueblo del recorrido, situado a ocho kilómetros, marchan a una velocidad bastante aceptable. Hemos salido con niebla y a medida que avanza el recorrido aquélla es más intensa. Pese a esta dificultad para los corredores, se va deprisa y hasta se produce una escapada a cargo de Cañardo, Montes, Barral, Cardona, Pou, A. Deloor y Digneff. Detrás piarcüa el resto del grupo, excepto Esteve, Molina, Ginés y los Trillo, que van más retrasados.
En esta forma se llega a Lachar, a 20 kilómetros. Al salir de este pueblo tenemos un pequeño descenso que sirve a los separados para acortar la ventaja. Reunidos todos sigue el tren fuerte. Cesa la niebla y poco después el día queda magnífico, pues nace un sol espléndido.
También cesa ahora la velocidad ; pero al llegar a un descenso bastante pronunciado, durante el cual cruzamos el río Genil, vuelve a apretarse la marcha.
El grupo sube en estas cuestas sin notables modificaciones. Asi transcurre por ahora la carrera, ni muy deprisa ni excesivamente lenta. El paisaje ahora es magnífico, igual que el tiempo.
EN LOJA
A las 2 horas 2 minutos 30 segundos de carrera llegamos a Loja, a 53 kilómetros de la salida. Un poco antes de entrar en este pueblo pincha el sevillano Montes, por lo que llega con un par de minutos de retraso. Los demás pasan en pelotón, a la cabeza del cual va Cañardo. A la salida de Loja es Ginés el que pincha y Montes entra en contacto con el grupo.
Kilómetros después hay que escalar nuevas cuestas, y antes de que Ginés haya dado alcance a los demás corredores, Vander Ruit, también por pinchazo, se queda rezagado. Vamos camino de Archidona. La marcha no es muy rápida y permite detenerse con frecuencia a los corredores. Vemos a Muía y a Cepeda entretenerse en arrancar frutos de unos árboles. Cañardo, poco antes de Archidona, inicia un demarraje y se separa algunos metros. Esto da lugar a que se fuerce nuevamente la marcha.
«OLE POR CAÑARDO, Y ALIGERA, QUE E ARRO».—VIVAS AL «HERALDO DE MADRID
Entramos en Archidona. Son las diez de la mañana. Hemos tardado, pues, tres horas y quince minutos. A la entrada del pueblo encontramos grandes letreros de salutación a los corredores. Uno de ellos dice
«Ole por Cañardo, y aligera, que e arró».
El primero en llegar a Archidona es Cañardo, y al instante, todos los demás, excepto Fayolle, que llega poco después.
Como ayer en Guadix, al llegar nuestro coche a Archidona un numeroso grupo de ciudadanos prorrumpe en vivas a HERALDO DE MADRID. Como conocen nuestro coche por las fotografías publicadas nos reservan estos aplausos, que tanta emoción nos producen.
Los vivas al HERALDO los oímos después, durante toda la ruta, en numerosos pueblos del trayecto. Pasamos frente al peñón llamado de los Enamorados, majestuoso y de una belleza extraordinaria. Aquí ha terminado la cuesta que desde hace bastantes kilómetros hemos tenido que escalar. Descendemos largo trecho. La carretera va entre montes con numerosas y pronunciadas curvas.
EL CONTROL DE APROVISIONAMIENTO
A las once y quince llegamos a Antequera donde está el control de aprovisionamiento y firma. Llevamos cuatro horas de carrera. Entra ligeramente destacado el sevillano Montes y siguen los hermanos Deloor con Cañardo. El último del pelotón es Esteve. La población está animadísima y se tributan estruendosas ovaciones al «paisano» Montes. Tres minutos en el control y se emprende el camino a Fuente de Piedra (sic).
Empieza, el terreno a ser malísimo, pues el piso está plagado de baches que dificultan extraordinariamente la marcha.
Al pasar por el pueblo de Mollina comienza a llover. Poco después cae un verdadero aguacero. Y ya todo el camino transcurre con alternativas entro lluvia y sol. Los corredores continúan agrupados y así llegamos a Fuente de Piedra (sic), 119 kilómetros.
VARIOS PINCHAZOS
Antes de llegar a La Roda, 128 kilómetros, pinchan Manuel Trillo, Barral y Adam, quedándose rezagados. Adam es el primero en volver a entrar en contacto con el grupo.
En grupos siguen al llegar a Estepa, 144 kilómetros. Pasamos igual por Aguadulce. Siguen en grupo, pero a fuerte tren, en Osuna. Antes de llegar a Puebla de Cazalla, 186 kilómetros, comienza a llover torrencialmente y vemos quedarse rezagados a Mula y Ginés, que ya permanecen así hasta el final.
A Puebla de Cazalla llegamos a las dos y media de la tarde.
Sigue el pelotón a fuerte tren. Y de él se separa Salvador Molina.
No tardamos mucho en llegar a Arahol, 209 kilómetros, donde el grupo va integrado por 25 corredores, de los que va el primero, como en la mayoría de los pueblos de la provincia, el sevillano Montes.
Detrás del pelotón van Sancho. Pou, Salvador Molina, Ramón Ruiz Trillo .y Ginés. Poco después pasa también a la retaguardia Blatmann, por haber pinchado.
Hay fortísimo viento de cara que dificulta la marcha y, no obstante, los corredores llevan buena velocidad. Dos aeroplanos vuelan por encima de la caravana ciclista y a escasa altura.
Los corredores llevan ahora una media de 40 kilómetros. La carrera se pone interesantísima.
Estamos próximos a Alcalá de Guadaira y vemos cómo se quedan rezagados Figueras, Cepeda y Bailón.
COMIENZA LA LUCHA EN FIRME
Los adelantados siguen a gran velocidad y dejan atrás también a Bachero y a Juneno. El aire viene de costado y es realmente difícil sostener el tren impuesto. Poco después se separa también Tallinger. Los demás .siguen a una media magnífica. Poco antes de Alcalá de Guadaira, Max Bulla se detiene a cambiar la multiplicación, y por su actitud ante la proximidad de la meta pensamos que vaya a ser también hoy el vencedor.
CERCA DE SEVILLA
La carrera está emocionante. Entramos en Alcalá después de nueve horas y veinte minutos de carrera.
Faltan 13 kilómetros para la meta. Descendemos ahora y se va a una velocidad vertiginosa. El pelotón se estira y después se parte en dos pedazos. Comienza de nuevo a llover.
Cardona demarra; pero Cañardo, vigiladísimo, no puede seguirle.
Faltan ya escasos kilómetros para llegar a la meta. Cuando vemos pinchar a Van der Ruit. que ya se queda rezagado en definitiva.
Pasamos por Dos Hermanas, donde el pelotón marcha velocísimamente.
Llegamos al paso a nivel de Sevilla, cuya barrera se cierra en el momento de llegar los corredores. Esto da lugar a que se reúnan los dos grupos, y todos los corredores saltan la barrera antes de llegar el tren.
Cuando reanudamos el camino y logramos alcanzar al pelotón hemos entrado en Sevilla. Van delante todos los clasificados en primer lugar de la etapa; es decir, que estos corredores no pierden ya sus puestos respectivos en los últimos metros.
Como al principio dijimos, el belga Deloor, en un alarde de energía y de cálculo, consigue aventajar a sus seguidores por escasísima diferencia y llega a la meta en primer lugar, seguido de Max Bulla, Cañardo y Cardona y del resto del pelotón.
La animación en Sevilla ha sido extraordinaria, como en todas las poblaciones que hasta ahora hemos recorrido; el final de la etapa ha sido presenciado por innumerable cantidad de público, que con el mayor entusiasmo ovacionó y paseó en hombros al vencedor, Deloor.
CLASIFICACIÓN DE LA ETAPA
1, Gustavo Deloor, 9 h. 59 m. 3 s.
2, Max Bulla, en el mismo tiempo
3, Cañardo, ídem.
4, Cardona, ídem.
5, Digneff, ídem.
6, Figueras, ídem.
7, Tuero, ídem.
8, Sancho, ídem.
9, Bachero, ídem.
10, Jimeno, ídem.
11, Vaientyn, ídem.
12, Tallinger, ídem.
13, Barral, ídem.
14, Molinar, ídem.
15, Bianchi, ídem.
16, Montes, ídem.
17, Esteve, ídem.
18, A. Deloor, ídem.
19, Adam, ídem.
20, Fayolle, ídem.
21, Amberg, 10 h. 44 s.
22, Vander Ruit, 10 h. 6 m. 9 s.
23, Bailón, ídem.
24, Blatmann, ídem.
25, Ginés, ídem.
26, Pou, ídem.
27, Ramón Trillo, ídem.
28, Molina, ídem.
29, Cepeda, ídem.
39 Mula, 10 h. 8 m. 20 s.
31Manuel Ruiz Trillo, 10 h. 28 m.
La clasificación general no sufre ninguna alteración de puestos.
La imagen corresponde al cartel anunciador de la primera Vuelta Ciclista a España.
La undécima etapa, de 260 km. se disputó el día 11 de mayo entre Granada y Sevilla. El ganador de la etapa fue el mismo de la general: el belga Gustaaf Deloor.
Así relataba el día once de mayo de 1935 el Heraldo de Madrid lo sucedido en la etapa:
La etapa de hoy
SEVILLA 11 (6 t.). — La etapa Granada-Sevilla, corrida hoy, ha sido mucho más interesante que las celebradas últimamente. Los corredores desde el primer momento se han empleado con más codicia y han desarrollado mejores velocidades. Tenemos noticias de que anoche el Comité organizador de la Vuelta se entrevistó con los routiers y les comninó a que actuaran con más entusiasmo.
Parece, incluso, que se adoptaron determinaciones enérgicas con algunos de estos corredores.
Efectivamente, la receta no ha podido dar mejor resultado.
El final de la etapa de hoy ha sido magnífico, pues bastantes kilómetros antes de llegar a Sevilla, los corredores empezaron a atacar firmemente y produjeron divisiones en el pelotón que iba en cabeza.
Momentos antes de llegar a la meta el belga Déloor hizo un esfuerzo fantástico, esfuerzo calculado además perfectamente, y logró aventajar por escasa diferencia a sus próximos seguidores, Max Bulla, Cañardo y Cardona.
LA SALIDA DE GRANADA
También hoy llevamos retraso. Aunque estaba anunciada la salida para las seis, hasta las siete menos veinte no partieron los corredores de la plaza del Carmen, de Granada, para cinco minutos después tomar la salida oficial en la avenida de la República.
Antes de emprender la marcha conversamos con los hermanos Trillo, quienes nos dijeron que se encontraban enfermos, especialmente Manolo, no obstante lo cual ambos emprendieron la marcha.
Se sale despacio, pero a los pocos kilómetros se fuerza la marcha y al pasar por Santafé, primer pueblo del recorrido, situado a ocho kilómetros, marchan a una velocidad bastante aceptable. Hemos salido con niebla y a medida que avanza el recorrido aquélla es más intensa. Pese a esta dificultad para los corredores, se va deprisa y hasta se produce una escapada a cargo de Cañardo, Montes, Barral, Cardona, Pou, A. Deloor y Digneff. Detrás piarcüa el resto del grupo, excepto Esteve, Molina, Ginés y los Trillo, que van más retrasados.
En esta forma se llega a Lachar, a 20 kilómetros. Al salir de este pueblo tenemos un pequeño descenso que sirve a los separados para acortar la ventaja. Reunidos todos sigue el tren fuerte. Cesa la niebla y poco después el día queda magnífico, pues nace un sol espléndido.
También cesa ahora la velocidad ; pero al llegar a un descenso bastante pronunciado, durante el cual cruzamos el río Genil, vuelve a apretarse la marcha.
El grupo sube en estas cuestas sin notables modificaciones. Asi transcurre por ahora la carrera, ni muy deprisa ni excesivamente lenta. El paisaje ahora es magnífico, igual que el tiempo.
EN LOJA
A las 2 horas 2 minutos 30 segundos de carrera llegamos a Loja, a 53 kilómetros de la salida. Un poco antes de entrar en este pueblo pincha el sevillano Montes, por lo que llega con un par de minutos de retraso. Los demás pasan en pelotón, a la cabeza del cual va Cañardo. A la salida de Loja es Ginés el que pincha y Montes entra en contacto con el grupo.
Kilómetros después hay que escalar nuevas cuestas, y antes de que Ginés haya dado alcance a los demás corredores, Vander Ruit, también por pinchazo, se queda rezagado. Vamos camino de Archidona. La marcha no es muy rápida y permite detenerse con frecuencia a los corredores. Vemos a Muía y a Cepeda entretenerse en arrancar frutos de unos árboles. Cañardo, poco antes de Archidona, inicia un demarraje y se separa algunos metros. Esto da lugar a que se fuerce nuevamente la marcha.
«OLE POR CAÑARDO, Y ALIGERA, QUE E ARRO».—VIVAS AL «HERALDO DE MADRID
Entramos en Archidona. Son las diez de la mañana. Hemos tardado, pues, tres horas y quince minutos. A la entrada del pueblo encontramos grandes letreros de salutación a los corredores. Uno de ellos dice
«Ole por Cañardo, y aligera, que e arró».
El primero en llegar a Archidona es Cañardo, y al instante, todos los demás, excepto Fayolle, que llega poco después.
Como ayer en Guadix, al llegar nuestro coche a Archidona un numeroso grupo de ciudadanos prorrumpe en vivas a HERALDO DE MADRID. Como conocen nuestro coche por las fotografías publicadas nos reservan estos aplausos, que tanta emoción nos producen.
Los vivas al HERALDO los oímos después, durante toda la ruta, en numerosos pueblos del trayecto. Pasamos frente al peñón llamado de los Enamorados, majestuoso y de una belleza extraordinaria. Aquí ha terminado la cuesta que desde hace bastantes kilómetros hemos tenido que escalar. Descendemos largo trecho. La carretera va entre montes con numerosas y pronunciadas curvas.
EL CONTROL DE APROVISIONAMIENTO
A las once y quince llegamos a Antequera donde está el control de aprovisionamiento y firma. Llevamos cuatro horas de carrera. Entra ligeramente destacado el sevillano Montes y siguen los hermanos Deloor con Cañardo. El último del pelotón es Esteve. La población está animadísima y se tributan estruendosas ovaciones al «paisano» Montes. Tres minutos en el control y se emprende el camino a Fuente de Piedra (sic).
Empieza, el terreno a ser malísimo, pues el piso está plagado de baches que dificultan extraordinariamente la marcha.
Al pasar por el pueblo de Mollina comienza a llover. Poco después cae un verdadero aguacero. Y ya todo el camino transcurre con alternativas entro lluvia y sol. Los corredores continúan agrupados y así llegamos a Fuente de Piedra (sic), 119 kilómetros.
VARIOS PINCHAZOS
Antes de llegar a La Roda, 128 kilómetros, pinchan Manuel Trillo, Barral y Adam, quedándose rezagados. Adam es el primero en volver a entrar en contacto con el grupo.
En grupos siguen al llegar a Estepa, 144 kilómetros. Pasamos igual por Aguadulce. Siguen en grupo, pero a fuerte tren, en Osuna. Antes de llegar a Puebla de Cazalla, 186 kilómetros, comienza a llover torrencialmente y vemos quedarse rezagados a Mula y Ginés, que ya permanecen así hasta el final.
A Puebla de Cazalla llegamos a las dos y media de la tarde.
Sigue el pelotón a fuerte tren. Y de él se separa Salvador Molina.
No tardamos mucho en llegar a Arahol, 209 kilómetros, donde el grupo va integrado por 25 corredores, de los que va el primero, como en la mayoría de los pueblos de la provincia, el sevillano Montes.
Detrás del pelotón van Sancho. Pou, Salvador Molina, Ramón Ruiz Trillo .y Ginés. Poco después pasa también a la retaguardia Blatmann, por haber pinchado.
Hay fortísimo viento de cara que dificulta la marcha y, no obstante, los corredores llevan buena velocidad. Dos aeroplanos vuelan por encima de la caravana ciclista y a escasa altura.
Los corredores llevan ahora una media de 40 kilómetros. La carrera se pone interesantísima.
Estamos próximos a Alcalá de Guadaira y vemos cómo se quedan rezagados Figueras, Cepeda y Bailón.
COMIENZA LA LUCHA EN FIRME
Los adelantados siguen a gran velocidad y dejan atrás también a Bachero y a Juneno. El aire viene de costado y es realmente difícil sostener el tren impuesto. Poco después se separa también Tallinger. Los demás .siguen a una media magnífica. Poco antes de Alcalá de Guadaira, Max Bulla se detiene a cambiar la multiplicación, y por su actitud ante la proximidad de la meta pensamos que vaya a ser también hoy el vencedor.
CERCA DE SEVILLA
La carrera está emocionante. Entramos en Alcalá después de nueve horas y veinte minutos de carrera.
Faltan 13 kilómetros para la meta. Descendemos ahora y se va a una velocidad vertiginosa. El pelotón se estira y después se parte en dos pedazos. Comienza de nuevo a llover.
Cardona demarra; pero Cañardo, vigiladísimo, no puede seguirle.
Faltan ya escasos kilómetros para llegar a la meta. Cuando vemos pinchar a Van der Ruit. que ya se queda rezagado en definitiva.
Pasamos por Dos Hermanas, donde el pelotón marcha velocísimamente.
Llegamos al paso a nivel de Sevilla, cuya barrera se cierra en el momento de llegar los corredores. Esto da lugar a que se reúnan los dos grupos, y todos los corredores saltan la barrera antes de llegar el tren.
Cuando reanudamos el camino y logramos alcanzar al pelotón hemos entrado en Sevilla. Van delante todos los clasificados en primer lugar de la etapa; es decir, que estos corredores no pierden ya sus puestos respectivos en los últimos metros.
Como al principio dijimos, el belga Deloor, en un alarde de energía y de cálculo, consigue aventajar a sus seguidores por escasísima diferencia y llega a la meta en primer lugar, seguido de Max Bulla, Cañardo y Cardona y del resto del pelotón.
La animación en Sevilla ha sido extraordinaria, como en todas las poblaciones que hasta ahora hemos recorrido; el final de la etapa ha sido presenciado por innumerable cantidad de público, que con el mayor entusiasmo ovacionó y paseó en hombros al vencedor, Deloor.
CLASIFICACIÓN DE LA ETAPA
1, Gustavo Deloor, 9 h. 59 m. 3 s.
2, Max Bulla, en el mismo tiempo
3, Cañardo, ídem.
4, Cardona, ídem.
5, Digneff, ídem.
6, Figueras, ídem.
7, Tuero, ídem.
8, Sancho, ídem.
9, Bachero, ídem.
10, Jimeno, ídem.
11, Vaientyn, ídem.
12, Tallinger, ídem.
13, Barral, ídem.
14, Molinar, ídem.
15, Bianchi, ídem.
16, Montes, ídem.
17, Esteve, ídem.
18, A. Deloor, ídem.
19, Adam, ídem.
20, Fayolle, ídem.
21, Amberg, 10 h. 44 s.
22, Vander Ruit, 10 h. 6 m. 9 s.
23, Bailón, ídem.
24, Blatmann, ídem.
25, Ginés, ídem.
26, Pou, ídem.
27, Ramón Trillo, ídem.
28, Molina, ídem.
29, Cepeda, ídem.
39 Mula, 10 h. 8 m. 20 s.
31Manuel Ruiz Trillo, 10 h. 28 m.
La clasificación general no sufre ninguna alteración de puestos.
La imagen corresponde al cartel anunciador de la primera Vuelta Ciclista a España.
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