MOLLINA EN LA HUELGA UNIVERSAL DE 1890

 

Los días uno y cuatro de mayo de 1890, jueves y domingo, fueron días de una semana de indudable trascendencia histórica. La clase obrera europea reclamaba por primera vez de forma coordinada y pública una de sus más importantes reivindicaciones: la jornada legal máxima de ocho horas. El Productor, de Barcelona, reproducía el veinticinco de abril de 1890 una hoja repartida entre los obreros. Decía:

 

Obreros todos: La Jornada de las Ocho Horas no es un ideal de un partido ni de una escuela: es la necesidad imperiosa de todos los esclavos del egoísmo humano. A todos los que ganan el pan con el sudor de su rostro, a todos los asalariados, interesa el triunfo de nuestra bandera. El que sea obrero, pues, que ocupe su puesto, si no quiere verse más pisoteado y humillado por la burguesía.

 

La prensa de aquel tiempo calculaba en más de trescientos mil los obreros manifestándose en Hyde Park de Londres. París, Chicago y todos los centros obreros importantes de la época fueron testigos de una lucha de cuyos frutos disfrutamos todos hoy.

 

Pues bien, La Época, diario conservador, en su edición del día cuatro de mayo de 1890 decía:

Dícese que en el pueblo de Mollina de esta provincia se han dado gritos subversivos.

 

Esa misma fecha La Monarquía, diario liberal conservador, publicaba al hablar de la situación de Antequera:

También se dice que en Mollina, pueblo inmediato á Antequera, se han dado gritos subversivos.

 

Por último el Diario de Córdoba, de Comercio, Industria, Administración, Noticias y Avisos del día seis de mayo dice:

Dícenme que en el inmediato pueblo de Mollina se han dado gritos subversivos.

 

Mollina no quedó fuera de una reivindicación universal. De entre los pueblos de su parecido nivel de población es el único citado.  Las imágenes corresponden a La Época del día cuatro, la segunda a La Monarquía y la tercera al Diario de Córdoba.