DETENIDA POR HURTO EN LUCENA. 1900
La noticia que viene a
continuación no tiene nada que ver con el bandolerismo. Un bandolero -aunque
venerado por escritores extranjeros, mitificado como libertador u homenajeado
hoy como reclamo turístico- no deja de ser un delincuente. Algunos de gran calado
como nuestro Tío Martín, sanguinario y cruel asesino, y otros de menos como
Malacarne, nuestro también, o como José María El Tempranillo, traidor a los
suyos además de delincuente.
Las personas que aquí aparecen
son personas que tienen que robar para poder comer. No tendrán ayuntamientos
que le levanten una estatua ni la Junta subvencionará una ruta turística con
sus nombres. Son los antecedentes de aquellos que en la posguerra recibirían
palizas en la casa cuartel.
Algunas de estas personas son
mujeres, lo que demuestra que la mujer trabajadora está a años luz de la señorita en cuestión de igualdad.
Este suelto salió en el Diario de
Córdoba de comercio, de industria, administración, noticias y avisos, año LI,
número 14.686 del día veintiséis de enero de 1900.El hecho de venir en el mismo
suelto da a entender que la Sra. Lozano estaba en las mismas condiciones que
las otras personas que aquí aparecen.
El suelto decía así:
-Guardia civil.-La benemérita del puesto de Castillo Anzur ha detenido
á dos vecinos de la aldea de Jauja que hurtaron una fanega de aceitunas en la
cacería (sic) de “Mora”, de aquel término.- La de Lucena á Carmen Delgado
Lozano, reclamada por el juez municípal (sic) de Mollina (Málaga.)- Y la de Belmez a
José Arellano Cáceres que cortó una carga de leña en la dehesa de “Fuente
Blanca.”
Comentarios
Publicar un comentario