REPASO A LOS NÚMEROS 41 A 45 DE LA RAZÓN. 1931
El número 41 de La Razón, aparecido el día 1 de noviembre de
1931 traía en sus páginas 2 y 3 un escrito contra los pelantrines de Mollina en
el que se alababa la postura de Antonio Vergara Casero, hijo del que fuera
alcalde Antonio Vergara Pérez:
El modo de proceder
los pequeños labradores de Mollina
En este pueblo, por
medio de comisión patronal obrera se acordó derribar los premios bajo condición
de retirar los obreros al trabajo, los cabeceras de casa, siquiera uno de cada
familia para así poder vivir todos: un acuerdo que de querer cumplirlo estaba
solucionado el conflicto. Pero, ¡oh fatalidad!; los grandes terratenientes han
cumplido su palabra, pero estos idiotas que no tienen dos pesetas están
desafiando al pueblo con devolver los obreros que le han pertenecido en acuerdo
tomado ante la Alcaldía y no querer pagarle sus salarios. Ellos el achaque suyo
es no tener dinero para que coma el obrero, pero en cambio tienen pesetas para
jugárselas en casa de Joaquín Lara, que unos a la vista y otros escondidos se
juegan las pesetas aquellas que les roban al desgraciado obrero porque no se
las dan y sí tienen los trabajos hechos porque el alcalde viéndose muy apretado
mandó los obreros a limpiar unos arroyos y hoy se niegan apagarle esos
traidores.
Pero no saben que tienen que pagar; aquí los
obreros respetando las autoridades y al Gobierno de la República no les han
hecho pagar por buenas o por malas, que de seguir así, eso ha de pasar; ellos
no se han de comer lo que no es suyo. Yo les ruego que no lo hagan; que paguen
y no dén lugar a que haya que darles un ejemplo. ¿Por que no secundáis a
nuestro paisano y grande labrador don Antonio Vergara Casero, que su obra no
puede ser más digna como un caballero que da una palabra y la cumple cual
ninguno en este pueblo, y otros que van en pos de él, pero como su obra tan
clara y buena ninguno? ¿No estáis viendo que ustedes se váis a ver en un
conflicto por su mal comportamiento? ¿Por qué no secundáis a los pequeños
labradores de Antequera, que están unidos a los obreros para hacerle la guerra
al capital que es nuestra misión? ¿No véis, ignorantes, que de seguir así
haciendo la guerra al obrero hoy, mañana tendréis que venir a nuestras filas
porque todos estaremos a la misma altura? Pero vendréis con vuestra cabeza
tirada a tierra, como arrepentidos de vuestra obra, pero ya es tarde, aunque
nosotros los socialistas acogemos en nuestro seno al arrepentido, pero al que
le dan un pinchazo le queda la cicatriz para que no se le olvide ¡y nosotros
llevamos tantos de vosotros!
Ustedes ven lo que
hacen, y de seguir así sepan que no estamos dispuestos a sufrir más calamidades
por vuestro dominio y vuestras fechorías.
FRANCISCO GONZÁLEZ.
El jueves 8 de octubre de 1931 El Popular, diario republicano malagueño traía en su página ocho este
suelto en su apartado de Informaciones de la Provincia:
MOLLINA
UNA SALVAJADA
En la mañana del dia 4
del actual y en ocasión de salir de la iglesia don Juan Ordóñez Diaz, persona
de intachable conducta y acrisolada honradez, fue objeto de malos tratos de
palabras por varios jóvenes de la Juventud socialista de esta villa,
distinguiéndose por sus actos groseros Antonio Rojas Doblas (a) “Saco de papa”,
que a su vez gestionaba un arma para agredirle.
Los insultos no sólo
atacaron al señor Ordóñez, sino que afectaron también a la dignidad de sus
familiares.
Lamentamos muy de
veras lo acaecido, por tratarse de una persona que, en la situación precaria
por que atravesamos, se puede asegurar, sin lugar a dudas, que de la fábrica
que posee el señor Ordóñez, se entregan varios centenares de pan, de los cuales
no ingresan ni un solo céntimo. ¡He ahí el pago!
Esperamos que el caso
no quedará impune y se tomarán providencias por quien corresponda, y con ello
evitaremos se reproduzcan casos de esta índole.-El Corresponsal.
La respuesta a este escrito apareció en ese número 41 de La Razón, en su página 3, aunque nos
quedamos sin enterarnos de la visión contraria, ya que la respuesta podría
pasar como ejemplo perfecto de falacia ad hominem. Decía:
Mollina
A un republicano del
14.
Tengo ante mi vista un
periódico: «El Popular». La indignación que me causa el ataque infundado de que
soy objeto, no es tanta como el descrédito que hace a la Juventud Socialista,
honrosa entidad como lo acredita su obra llevada a feliz término y con una
abnegación sin igual.
Quiero advertir al señor corresponsal de dicho
periódico, que no es él persona que puede censurar los hechos de un semejante,
pues no creo que tenga autoridad moral para ello.
¿Quiere decirnos de qué come este señor
republicano?
Trabajando
solapadamente al lado del cacique y mezclándose en todas las, infamias,
arrastra su miserable vida como un reptil inmundo y despreciable, que nos hace
suponer sea pagado por la reacción para atacar, protegido por la sombra, a los
obreros.
Mas no crea, señor
republicano, que su infame y canallesca actuación pasa o ha pasado inadvertida
para nosotros: nada de eso. Es que consideramos perdido el tiempo que gastemos
en intervenciones con usted: preferimos no darnos por enterados.
Pero ahora, al volver
a atacar nuevamente a mi modesta persona y en particular a la Juventud
Socialista, como miembro de ella tengo el ineludible deber de salir a la
palestra y desenmascararlo ante los compañeros.
Su indigno y cobarde
proceder lo demostró en las elecciones del día 28 de junio cuando borró de la
candidatura a nuestro muy estimado paisano y compañero Antonio García Prieto,
persona de intachable honradez y ejemplar conducta, interviniendo y
coaccionando a incautos ancianos para que depositaran su voto en la urna con el
nombre de Prieto borrado, el luchador incansable por los obreros y por su
emancipación. Sin tener en cuenta que procedía como, otro Judas, que le había
echado el brazo por el hombro muchas veces cuando venía a este pueblo. Y ¿para
qué decir más? ¡Podriamos decir tantas cosas! Pero optamos por callar.
Y ahora, señor republicano, quiero que me diga
qué arma era la que esgrimía «Saco de papas» en su discusión con el señor
Ordóñez. ¿La vió su señoría? ¿Se lo dijeron acaso los monárquicos de este
pueblo, aunque como usted se llamen republicanos del 14? Vamos, hombre, que el
levantar calumnias, traicionar a los obreros, colaborar con el cacique, etc.,
etc., nada dice en favor de un hombre, pero sí dice mucho en favor de un
traidor. Nada más.
ANTONIO ROJAS DOBLAS
(Saco de Papas)
El número 42, del día 8 de noviembre no traía noticias de
Mollina, así como tampoco el 43, del día
15 del mismo mes, ni el 44, del día 22, ni el 45 del día 29 de noviembre de
1931.
Comentarios
Publicar un comentario